Condenaron a los prefectos acusados de asesinar a Rafael Nahuel

Sergio Cavia fue condenado a 5 años de prisión; Francisco Javier Pintos, Carlos Velntín Sosa, Juan Ramón Obregón y Sergio García a 4 años y seis meses de prisión efectiva. Vale señalar que las tres querellas solicitaron una condena de prisión perpetua por considerarlos coautores funcionales del delito de homicidio doblemente calificado en concurso ideal con homicidio agravado en grado de tentativa. Por su parte, la Fiscalía pidió cinco años de prisión para cada uno al acreditar que hubo un enfrentamiento y considerar el atenuante de «exceso en legítima defensa».

Mariano Przybylski, Director Nacional de Políticas contra la Violencia Institucional de la Secretaría de Derechos Humanos y querellante en la causa Rafael Nahuel se refirió a los hechos e informó que «tenemos 5 prefectos del grupo Albatros que están imputados por el homicidio de Rafael. Hubo un desalojo el 23 de noviembre de 2017 del terreno en Villa Mascardi, que había sido recuperado por la Comunidad Wincul a la cual pertenecía Rafael. Se ordenó el desalojo con orden judicial a la Policía Federal Argentina que desaloja el día 23». Przybylski señaló también que «en ese desalojo algunos miembros varones de la comunidad escaparon corriendo montaña arriba, la policía los persigue y no los puede detener».

Los hechos continuaron dos días después cuando «el 25 de noviembre, la zona había quedado bajo custodia del Grupo Albatros de Prefectura y en una recorrida por la montaña estos cinco imputados se topan con algunos miembros de la comunidad que habían quedado montaña arriba», tal como comentó Mariano Przybylski quien añadió que, «lo que dice prefectura es que los miembros de la comunidad estaban armados con armas de fuego, que les hicieron una emboscada, que hubo un ‘enfrentamiento armado’, y que ellos por legítima defensa no les quedó otra más que disparar sus armas con munición letal. En esos disparos murió Rafael».

Mariano Przybylski , informó que «lo que nosotros pudimos probar durante el debate oral es que cuando ellos se topan con los miembros de la comunidad y dan la voz de alto, los miembros de la comunidad dan media vuelta y escapan montaña arriba porque no estaban armados con armas de fuego. Los prefectos los persiguen disparando munición letal. 150 disparos entre los cinco, uno de esos tiros lo mata a Rafael de atrás hacia adelante». En este aspecto la querella sostiene que «pudimos acreditar en el debate que la escena fue la de una persecución disparando munición letal con intención de matar».

Por último, Przybylski recordó que en la primera audiencia los dos de los imputados «hicieron uso de su derecho a declarar en indagatoria. Los dos dijeron abiertamente que ellos habían hecho lo que los jueces y los políticos no se animaban a hacer para resolver el problema mapuche y que había que tener el coraje que no tuvieron otros, ese coraje era ir a matarlos».

Producción: La cocina del miedo
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