Desde la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) repudiamos el vergonzoso proyecto votado en la Legislatura Mendocina que niega, además de otras graves e inaceptables cuestiones, la existencia ancestral del Pueblo Mapuche en nuestros territorios. Se trata de una avanzada que debe ser visibilizada y denunciada, porque presumimos no será la única.
No se nos escapa tampoco que esta inaceptable e ilegal decisión le abre paso a la pretensión de arrebatarles a esa comunidad sus territorios.
La derecha política, sin duda alguna, protege los intereses y privilegios de las élites sin importarles que con esas acciones se vulneren derechos de raigambre constitucional y se violen los Tratados y Convenciones internacionales que obligan a Estado argentino.
Alertamos, con enorme preocupación, sobre estas prácticas xenófobas y los discursos de odio que se vienen instalando día tras día, promotores de las más variadas formas de violencia hacia los más vulnerables.
No podemos ni queremos permanecer indiferentes frente a ello, ni ante los negacionistas y sus promotores, ni ante el más execrable racismo contra nuestros hermanos y hermanas originarias.
Sabemos bien de lo que han sido capaces en el pasado los dueños de todas las cosas. Urge que levantemos la voz a quienes aspiramos a vivir en paz entre todos y todas y en armonía con la propia naturaleza, aún en la diversidad de nuestras miradas y prácticas políticas, antes de que sea demasiado tarde.