Frente a la masiva movilización por San Cayetano encabezada por movimientos sociales, centrales obreras y partidos políticos bajo el lema “Paz, Pan, Tierra, Techo y Trabajo”, el Gobierno decidió aislarse y desoír los reclamos de miles de personas, por lo que valló Plaza de Mayo a la altura de Balcarce para alejar a lxs manifestantes de la Casa Rosada del escenario final de la protesta.
Según informó la agencia Noticias Argentinas, Casa Militar dispuso algunas unidades de contención y brigadas de investigaciones que se suman al refuerzo de la Superintendencia de Seguridad y la custodia del lugar.
El pasado martes, el vocero presidencial, Manuel Adorni, hizo eco de la manifestación coordinada desde el barrio porteño de Liniers, al sostener que la peregrinación “debe limitarse a una cuestión estrictamente de fe o religiosa y que no se tiene que entremezclar la política”.
En la convocatoria participan la Confederación General del Trabajo (CGT), la Central de Trabajadores Autónomos (CTA), la Unión Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) y distintos movimientos sociales como el Polo Obrero, Barrios de Pie, la Corriente Clasista y Combativa (CCC), entre otras.